El níquel es un metal de color blanco brillante, medianamente duro, tenaz, dúctil y maleable.
Junto con el hierro y el cobalto, forma el grupo de materiales ferromagnéticos.
Es muy resistente a la corrosión y a la oxidación, tanto de los agentes atmosféricos, como de los
ácidos y las sustancias alcalinas.
El níquel es un metal de transición de color blanco plateado, conductor de la electricidad y del
calor, se puede laminar, pulir y forjar fácilmente, y presenta ferromagnetismo a temperatura
ambiente. Se encuentra en distintos minerales, en meteoritos (aleado con hierro) y hay níquel en
el interior de la Tierra.
Su punto de fusión es de 1455 °C, su densidad de 8’9 g/cm3.
Proceso de obtención
Para obtener níquel metálico se sigue un proceso similar al del cobre: primero se tritura y muele
el mineral y se separan los sulfuros por flotación; después, se tuesta la mezcla hasta obtener la
mata de óxido de níquel; posteriormente, se reduce éste con carbono y , finalmente, se afina el
metal por métodos electrolíticos, utilizando ánados de níquel impuro y cátodos formados por
láminas de níquel puro.(La ventaja de extraer o refinar metales por procesos electrolíticos es que
el metal depositado es de gran pureza).
Aleaciones
Entre las de alto porcentaje en níquel, en las que este llega a alcanzar hasta el 80 %, destacan la
aleación con hierro, al que confiere gran resistencia a la corrosión y mejora sus propiedades
magnéticas; el nicrom que es una aleación de níquel y cromo, utilizado para fabricar resistencias
eléctricas por su resistividad; el invar., empleado en relojería por su coeficiente de dilatación
prácticamente nulo.
Monel es el nombre que se asigna a las aleaciones comerciales con razones níquel-cobre El monel
es más duro que el cobre y extremadamente resistente a la corrosión y posee una elevada resistencia al impacto Las aleaciones del monel resisten a la corrosión en un mayor rango de
ambientes. Posee mayor resistencia que el níquel al ácido sulfúrico, salmuera y agua.
El álnico o alnico es una aleación formada principalmente de cobalto, aluminio y níquel, aunque
también puede contener hierro-cobre y en ocasiones titanio. Su uso principal es en aplicaciones
magnéticas.
En las de bajo contenido en níquel, su porcentaje de presencia no supera el 15%. Suele alearse con
hierro y acero para mejorar para mejorar las características mecánicas de éstos y facilitar los
tratamientos de templado.
Los materiales que se obtienen resultan muy resistentes a la acción de los agentes atmosféricos y
de los agresivos químicos, por lo que suelen emplearse para fabricar utensilios de cocina, material
quirúrgico y de laboratorio, y acumuladores de energía eléctrica. Las monedas de níquel en uso
son una aleación de 25% de níquel y 75% de cobre. El níquel es también un componente clave de
las baterías de níquel-cadmio.
Aplicaciones
Debido a su gran resistencia a la corrosión, se emplea en la industria alimentaria y en la química
para el revestimiento electrolítico de chapas de acero dulce. Este método se denomina niquelado.
Rara vez se utiliza en estado puro. Es más frecuente encontrarlo formando aleaciones con el
cobre, el hierro, el cromo, el volframio y el manganeso, a las que confiere un carácter inoxidable.
Las aleaciones que contienen níquel se caracterizan según el porcentaje de este metal: Entre las de
alto porcentaje en níquel, en las que este llega a alcanzar hasta el 80 %, destacan la aleación con
hierro, al que confiere gran resistencia a la corrosión y mejora sus propiedades magnéticas; el
nicrom, utilizado para fabricar resistencias eléctricas por su resistividad; el invar., empleado en
relojería por su coeficiente de dilatación prácticamente nulo.
En las de bajo contenido en níquel, su porcentaje de presencia no supera el 15%. Suele alearse con
hierro y acero para mejorar para mejorar las características mecánicas de éstos y facilitar los
tratamientos de templado.
Los materiales que se obtienen resultan muy resistentes a la acción de los agentes atmosféricos y
de los agresivos químicos, por lo que suelen emplearse para fabricar utensilios de cocina, material quirúrgico y de laboratorio, y acumuladores de energía eléctrica. Las monedas de níquel en uso
son una aleación de 25% de níquel y 75% de cobre. El níquel es también un componente clave de
las baterías de níquel-cadmio.
Aproximadamente el 65% del níquel consumido se emplea en la fabricación de acero inoxidable
austenítico y otro 12% en superaleaciones de níquel. El restante 23% se reparte entre otras
aleaciones, baterías recargables, catálisis, acuñación de moneda, recubrimientos metálicos y
fundición
No hay comentarios:
Publicar un comentario